Gamificación: ¿Cómo jugar en el trabajo puede mejorar la productividad de tu equipo?
A pesar de que el trabajador de nuestra región fue nombrado como uno de los más comprometidos con sus labores, no es novedad para las áreas de Recursos Humanos encontrarse con una disminución de la capacidad de atención en todas las áreas de las empresas. Ante este problema, la gamificación puede funcionar como una solución efectiva al aumentar la productividad de cerca del 90% de un equipo de trabajo.
En definición, la gamificación es una tendencia de gestión del talento que consiste en el uso de elementos lúdicos en un contexto laboral con la finalidad de impulsar la participación del trabajador, su lealtad y motivar una acción deseada. Ya sea que una marca necesite aumentar las ventas, recopilar datos, motivar a los empleados, modificar un determinado comportamiento o resolver un problema empresarial; la gamificación bien estructurada puede actuar como una "varita mágica" para todos los casos.
“La gamificación en el centro de trabajo no es simplemente convertir el trabajo en un juego. Se trata de utilizar la sicología para motivar a un equipo de trabajo, mejorar la productividad y alcanzar mejores resultados. La aplicación de la gamificación adapta las mecánicas de los juegos para agregar el sentido de competencia en el ambiente de trabajo y fomentar el comportamiento de los empleados hacia el logro de diferentes metas de la empresa”, afirmó Luciano Barredo, gerente de marketing de Navent, empresa dueña de Bumeran y Adondevivir.
Por ello, Bumeran ha elaborado una lista de cinco actividades que ayudarán a implementar la gamificación en cualquier empresa:
Construya el equipo: Un equipo unido, es un equipo productivo. Por lo tanto, es necesario construir un ambiente amigable y saludable dentro de la oficina. Más allá de las actividades diarias, la confianza, la competitividad y la solidaridad deben ser parte de la cultura corporativa.
Por ello, lo ideal es romper el hielo realizando actividades con grupos pequeños como el personal de un área o el equipo encargado de un proyecto. Juegos como verdad o reto, búsqueda del tesoro o charadas pueden resultar divertidas y permiten a las personas comportarse de forma natural y crear un lazo con sus compañeros.
Establezca las reglas: Divida un proyecto u objetivo grande en una secuencia de tareas más pequeñas y manejables que sean más fáciles de monitorear y evaluar. Al realizar tareas más pequeñas dentro de una etapa, el trabajador obtiene puntos adicionales que se suman a su experiencia individual y se pueden intercambiar por bonos o beneficios de la vida real, por ejemplo. Útiles de oficina, cupones de empresas locales, etc.
Para ello, se debe crear un sistema justo de puntajes y niveles para mantener a todos los miembros de su equipo en la misma página durante todo el proceso.
Monitoree el progreso: Para proporcionar retroalimentación clara y en tiempo real sobre cada acción, en cada etapa del proceso, cree una tabla de clasificación de equipos unificada. Esto ayudará a establecer la responsabilidad y aumentar la transparencia dentro de la competencia.
Sin embargo, es necesario que esta tabla esté basada en logros y progreso: no convierta la tabla de líderes en un muro de vergüenza. El refuerzo negativo está perfectamente bien, pero hay una línea que no se debe cruzar si no se desea que la competencia amistosa se convierta en un conflicto dentro del equipo.
Recompense el esfuerzo: Se puede establecer un sistema de insignias para reconocer y recompensar a los empleados de alto rendimiento e introducir penalizaciones para "castigar" a los rezagados (algo pequeño y alegre para no estimular la enemistad entre los compañeros del equipo).
Por ejemplo, puede recompensar a todos los miembros del equipo ofreciendo entradas gratis de cine de vez en cuando. Sin embargo, el equipo o las personas con el rango más alto en su tabla de clasificación pueden elegir la película.
En el caso de las penalizaciones se puede intentar con leer un libro relacionado con el trabajo, dejar el café por un día, etc.
Motive a quienes tengan menor rendimiento: Cuando recompense y celebre a los miembros más eficientes de su equipo, no deje que el resto del equipo se sienta excluido o desanimado.
Trate de ver y reconocer los pequeños logros incluso con los miembros del equipo menos productivos. Además, puede hacer que aquellos que cuenten con los mejores puntajes se unan a los rezagados para trabajar juntos en algunas tareas.
Para Barredo, el implementar la gamificación es una apuesta muy rentable, pero es necesario que se haga de forma responsable. “El excesivo uso de la gamificación en el entorno laboral puede causar fatiga en los empleados y convertir a la oficina en un ambiente estresante. Asimismo, es necesario que los juegos estén bien implementados, tomando en cuenta las posibilidades de todo el equipo, con el fin de motivar a todos a participar en búsqueda de los objetivos que se necesiten alcanzar.”, afirmó el experto.
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